¿Te falta fuerza de voluntad para hacer ejercicio en casa?

No eres el único al que la fuerza de voluntad le flaquea y le juega malas pasadas. Te apuntas al gimnasio y no vas, pruebas comprando ropa y complementos para hacer ejercicio en casa y no los usas… Te suena, ¿verdad? Esto es algo muy común, tenemos buenos propósitos pero al final quedan en saco roto.

Pero esto no solo pasa a la hora de realizar ejercicio, tenemos como ejemplo de falta de fuerza de voluntad los propósitos de año nuevo que no llegan ni a febrero o empezar una dieta y que a la semana siguiente no quede rastro de ella. Pero esto tiene una explicación científica que si conoces te puede ayudar a verlo desde otra perspectiva y así conseguir la motivación necesaria para hacer ejercicio en casa.

Índice:

• La fuerza de voluntad y el cerebro
• Entrenar la fuerza de voluntad
• Consejos para hacer ejercicio en casa
• Ventajas de hacer ejercicio en casa

La fuerza de voluntad y el cerebro

¿Qué le pasa a mi cerebro? No le pasa nada, el cerebro está cómodo con su rutina e incorporar nuevos hábitos le resulta estresante y agotador. Sabemos que una cosa nos perjudica pero continuamos haciéndola, o por el contrario sabemos que algo nos irá bien y no hay forma de ponerlo en práctica. Está es la incoherencia del ser humano.

La motivación está íntimamente conectada con la fuerza de voluntad y la falta de una lleva al fracaso de la otra. Sabiendo esto quizá podamos entender mejor cómo puede ser posible que aún sabiendo que un cambio de hábitos saludable como puede ser hacer ejercicio en casa que encima nos va a reportar grandes mejoras, sigamos sin hacerlo. ¡La fuerza de voluntad también se entrena!

Entrenar la fuerza de voluntad

Hay que estar motivados para conseguir nuestro objetivo, que a su vez es nuestra motivación. Este puede ser bajar de peso o desentumecer el cuerpo después de un largo periodo de inactividad, sea cual sea puede ser que si no estás acostumbrado a hacer ejercicio acabes por ponerte excusas a ti mismo.

Consejos para hacer ejercicio en casa

Conviértelo en una rutina

Es importante mantener una continuidad para que nuestra motivación sea constante. Si no te lo planteas así, empezarás a fallar porque tienes que hacer esto o aquello. No te pongas excusas absurdas y tómatelo en serio, siempre podemos sacar un rato para hacer una rutina HIIT en casa.

Márcate metas

Depende cual sea tu objetivo puedes necesitar más o menos tiempo para alcanzarlo. Lo importante es ir marcando una serie de metas para que las vayas logrando, lo que te dará un empujón y te irá creando la necesidad de continuar con tus ejercicios en casa.

Comparte con alguien tu motivación

Otro de los misterios de nuestra mente es que tenemos mayor capacidad de comprometernos con otra persona que con nosotros mismos. Así que, coméntale a un familiar o a tu grupo de amigos cuáles son tus planes, esto te hará sacar más fuerza de voluntad al saber que serás recompensado conforme los vayas cumpliendo o por el contrario estarán ahí para recordarte lo que no estás haciendo.

Renueva las rutinas

Hazlo divertido, empieza por las que más te gusten y ve exigiéndote más poco a poco. Varía las rutinas para no cansarte, la época de repetir el mismo vhs pasó a mejor vida, ahora tienes cientos de videos en internet para acompañarte en tu sesión de entrenamiento que se van renovando casi a diario.

Tu momento de bienestar

Míralo siempre como un beneficio para tu salud, esto que estás haciendo ya no es solo cuestión de estética, es cuestión de salud. En dos meses habrás creado el hábito de hacer ejercicio y tendrás el control absoluto, tu fuerza de voluntad se ha merendado a tu desidia.

Ventajas de hacer ejercicio en casa

Hay que ver el lado positivo de las cosas y en este caso las ventajas de entrenar en casa además de variadas siempre motivan:

• Puedes entrenar con tu música favorita al volumen que te apetezca
• No tienes que hacer colas para utilizar un accesorio/máquina
• Te evitas a la “mofeta del gimnasio” que lleva la misma ropa durante toda la semana
• No dependes de horarios para asistir a las clases dirigidas
• Tienes el baño solo para ti y durante el tiempo que tú quieras
• No pierdes tiempo en atascos para ir y venir del gimnasio
• No pagas ninguna cuota mensual

Conclusión

Fortalecer la fuerza de voluntad es una cuestión en la que solo tú puedes coger el mando. Tener un objetivo claro, simplificar las cosas y no buscar excusas te darán la motivación que necesitas para que consigas realizar ejercicio en casa de modo satisfactorio.